porque esta fecha es ideal para eso.. no se porque....




Es increible que cuando menos cosas publico ganó más visitas, creo que tendre que hacer eso más seguido.... ahora.. una idea que se me ocurrio hoy en la micro hacia mi ex-colegio...
La sierra.
Sergio había hecho ya la compra que necesitaba. Llevaba la pala que el vendedor le indicó como la mejor opción, aunque sinceramente a Sergio no le importaba, pues sólo la iba a utilizar esta vez. En su camioneta también se encontraban unas tablas pequeñas, un martillo y algunos clavos. Le había costado decidirse entre el hacha, la sierra o el serrucho. Prefirió utilizar el arco de sierra que tenia en algún lugar de su casa, y de ese modo economiza un poco los gastos.
En la mañana Sergio se había despertado con un gran dolor de cabeza, y algo cansado debido a que no estaba acostumbrado a dormir en el sillón. Se levantó y lo primero que sintió fue el sol golpeándole en los ojos. Instantáneamente el aroma de alcohol impregnado en su ropa le provocó nauseas, obligándolo a correr al baño.
Mientras bajaba las cosas de su auto, apareció Eduardo, el joven vecino que se había mudado hace poco.
- ¿Qué piensa hacer con todo eso Don Sergio?
- Me salió una peguita extra en la casa, no me gusta trabajar pero mi señora encontró el modo de obligarme.
- Ah, el otro día la mía me obligo a cortar el pasto. A veces la guatona se pone muy insistente.
- Bueno, de hay hablamos, tengo q irme.
Realmente tenia que irse, no era una excusa como las que siempre utilizaba para sacarse de encima a gente hostigosa como su vecino.
En todo el tiempo que gastó en vomitar después de despertar, no recordó nada de lo había pasado la noche anterior. En el momento que regreso a su pieza a cambiarse su ropa maloliente se dio cuenta que había destruido un par de cosas valiosas. Sus momentos de ira con alcohol eran tan comunes que el único sentimiento que tuvo fue de resignación.
Cortó las maderas, formando con ellas un cajón de 30x50 cm. Las clavo, dejando una tapa del mismo tamaño. Luego fue a limpiar su pieza, de la cual recogió hasta los vidrios de su pantalla de televisión, esa que había comprando a crédito y todavía estaban pagando. Tomó las sabanas y todas las cosas sucias con vino, y otras sustancias y las llevó al baño. El silencio le empezó a molestar así que prendió tranquilamente la radio, puso su radio favorita, esa que habla de noticias y las cosas que pasan en el mundo, don Sergio siempre ha sido alguien informado. Se sirvió otra copita para la resaca, no existe mejor cura.
La cortó para que pudiera entrar en la caja, hizo el hoyo en su patio, metió la caja y luego dijo “hasta pronto amor”.
Inconvenientes en los servicios públicos |
Vea lo que pasa cuando se confía en los cronopios. Apenas lo habían nombrado Director General de Radiodifusión, este cronopio llamó a unos traductores de la calle San Martín y les hizo traducir todos los textos, avisos y canciones al rumano, lengua no muy popular en la Argentina.
A las ocho de la mañana los famas empezaron a encender sus receptores, deseosos de escuchar los boletines así como los anuncios del Geniol y del Aceite Cocinero que es de todos el primero. Y los escucharon, pero en rumano, de modo que solamente entendían la marca del producto. Profundamente asombrados, los famas sacudían los receptores pero todo seguía en rumano, hasta el tango Esta noche me emborracho, y el teléfono de la Dirección General de Radiodifusión estaba atendido por una señorita que contestaba en rumano a las clamorosas reclamaciones, con lo cual se fomentaba una confusión padre.
Enterado de esto el Superior Gobierno mandó fusilar al cronopio que así mancillaba las tradiciones de la patria. Por desgracia el pelotón estaba formado por cronopios conscriptos, que en vez de tirar sobre el ex Director General lo hicieron sobre la muchedumbre congregada en la Plaza de Mayo, con tan buena puntería que bajaron a seis oficiales de marina y a un farmacéutico. Acudió un pelotón de famas, el cronopio fue debidamente fusilado, y en su reemplazo se designó a un distinguido autor de canciones folklóricas y de un ensayo sobre la materia gris. Este fama restableció el idioma nacional en la radiotelefonía, pero pasó que los famas habían perdido la confianza y casi no encendían los receptores. Muchos famas, pesimistas por naturaleza, habían comprado diccionarios y manuales de rumano, así como vidas del rey Carol y de la señora Lupescu. El rumano se puso de moda a pesar de la cólera del Superior Gobierno, y a la tumba del cronopio iban furtivamente delegaciones que dejaban caer sus lágrimas y sus tarjetas donde proliferaban nombres conocidos en Bucarest, ciudad de filatelistas y atentados.
La foto salió movida |
Un cronopio va a abrir la puerta de calle, y al meter la mano en el bolsillo para sacar la llave lo que saca es una caja de fósforos, entonces este cronopio se aflige mucho y empieza a pensar que si en vez de la llave encuentra los fósforos, sería horrible que el mundo se hubiera desplazado de golpe, y a lo mejor si los fósforos están donde la llave, puede suceder que encuentre la billetera llena de fósforos, y la azucarera llena de dinero, y el piano lleno de azúcar, y la guía del teléfono llena de música, y el ropero lleno de abonados, y la cama llena de trajes, y los floreros llenos de sábanas, y los tranvías llenos de rosas, y los campos llenos de tranvías. Así es que este cronopio se aflige horriblemente y corre a mirarse al espejo, pero como el espejo esta algo ladeado lo que ve es el paragüero del zaguán, y sus presunciones se confirman y estalla en sollozos, cae de rodillas y junta sus manecitas no sabe para que. Los famas vecinos acuden a consolarlo, y también las esperanzas, pero pasan horas antes de que el cronopio salga de su desesperación y acepte una taza de té, que mira y examina mucho antes de beber, no vaya a pasar que en vez de una taza de té sea un hormiguero o un libro de Samuel Smiles.